martes, 3 de junio de 2014

No sé.

En días como este, gélidamente cálidos, enormemente pequeños, que parecen insignificantes pero son un paso en mi vida, me paro a pensar en el futuro y en lo que me depara, en el pasado y mi historia.

He intentado avanzar y mejorar, exigirme tanto a mí misma que no sé a dónde quiero llegar. Ya no sé si lo que hago es porque quiero hacerlo, o porque debo hacerlo. No sé si en el futuro seré mejor o peor persona. Tampoco sé si soy mejor ahora que antes o viceversa. Simplemente espero a que los días pasen, como sea. Amaneciendo y viviendo de manera indiferente, mirando el reloj y observando la rapidez del paso de las horas, esperando a que llegue la noche para dormir y no seguir pensando.

Sólo sé que vivo agotada. No doy lo mismo de mí, no digo que sea menos, pero es diferente. Hacía tiempo que no me paraba a pensar en el pasado. Es irremediable, lo sé, pero es una parte de mi vida, y siento que no puedo seguir haciendo como si no hubiese sucedido nada. En gran parte ésa es mi actitud; quiero decir que, es lo que muestro a los demás. Pero en esa otra pequeña parte hay un nudo apoderándose de mí de vez en cuando. Quizá ésta sea una de esas veces. Siento que los días transcurren como si no pasase nada bueno, y tampoco nada malo. Siento que son simplemente horas y breves sonrisas forzadas que no expresan nada: ni alegría, ni tristeza. Sonrisas de compromiso.

Es probable que ésta sea una de esas veces en las que no sabes lo que sientes. En las que no sabes si quieres llorar, reír, dormir o bailar, gritar o quedarte callada escuchando a las gentes de las calles, los motores desgastados de los coches que aceleran con pesadumbre, o la pelota de los niños que juegan un partido de fútbol improvisado en el asfalto. Ya no sabes si quieres cambiar o seguir siendo tal y como has sido hasta ahora. No sabes si necesitas algo nuevo en tu vida o si ya lo tienes todo. Es como un vacío que te llena hasta tal punto de no poder respirar sin hacer un esfuerzo.

No sé, la verdad es que con esta entrada no intento demostrar que esté triste, cosa que es incierta, pero sí intento reflexionar, porque a veces echo de menos o algo así, aunque aún no sé qué es lo que añoro. Siento que aún falta algo en mí.

No hay comentarios:

Publicar un comentario