jueves, 6 de marzo de 2014

NO al racismo y la xenofobia.


Di NO al racismo. NO a la injusticia. NO a la intolerancia.

¿Crees realmente que una persona es menos que tú por ser de otro país?
¿Te has parado a pensar alguna vez en cómo se sienten las personas que son menospreciadas por otras por su ideología, su color de piel o su sexo? ¿Qué crees que sentirías si fueses tú la persona a quien están despreciando por algo que no controla o por algo con lo que no hace daño a nadie?

...

" En un avión, iniciado el vuelo, una señora oprime insistentemente el timbre para llamar a la azafata.

-¿Cuál es el problema, Sra.? - Pregunta la azafata


-¿Es que no lo ve? - Responde la dama


- Me colocaron junto a un sucio indígena. No soporto estar al lado de uno de estos seres repugnantes... ¿¿¡¡No tiene otro asiento!!??

-Por favor, cálmese... -dice la azafata- Casi todos los asientos están ocupados. Pero voy a ver si hay un lugar disponible.

La azafata se aleja y vuelve de nuevo algunos minutos más tarde: 

-Sra., como yo pensaba, ya no hay ningún lugar libre en la clase económica. Hablé con el comandante y me confirmó que no hay más sitios disponibles en la clase económica. No obstante, tenemos aún un lugar en primera clase. 

Antes de que la dama pudiera hacer el menor comentario, la azafata sigue: 

-Es del todo inusual permitir a una persona de la clase económica sentarse en primera clase. Pero, dadas las circunstancias, el comandante encuentra que sería escandaloso obligar a alguien a sentarse junto a una persona tan repugnante.

Todos los pasajeros alrededor, observaban la escena, indignados.

Entonces, la azafata, dirigiéndose al "indígena", le dice: 

-Si el Sr. lo desea, tome su equipaje de mano, ya que un asiento en primera clase le espera. 

Y los pasajeros, que sorprendidos, presenciaban la escena, se levantaron y aplaudieron. "



Con este pequeño cuento quiero decir que, pensando que somos mejor que los demás por ser diferentes, demostramos el hecho de ser unos verdaderos ignorantes, ya que por dentro todos somos iguales; es decir, somos personas. Así que debemos aprender a valorar a los demás antes de pedir que nos valoren a nosotros, o bien debemos buscar en nuestros defectos y ver que, menospreciar a alguien por su color de piel, sexo, ideología o cualquier otro aspecto que lo diferencie de nosotros, sólo nos lleva a un camino de soledad y egoísmo.

1 comentario:

  1. Si todos fuésemos ciegos no diferenciaríamos el color de la piel...diferenciar es poner barreras! TODOS SOMOS IGUALES. (Gracias Rosa por mostrar tus valores sin tapujos ni miedo)

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